No salir, tener miedo de que pase algo en casa cuando vuelvo, enconcharme, pasarme el día con mis plantas y mis bichos, leyendo, tejiendo, escribiendo, me parecían síntoma de depre o de angustia o de cagazo. Pero ¿si realmente no quiero ocuparme de nada ni de nadie que no sea yo misma y mi literatura y mi música y mis cuerpas simbióticas? ¿Si estuve toda la vida ocupándome de les demás y ahora quiero darme permiso para vivir yo, yo, yo, sola?
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