El encuentro. Una casa de cinco ambientes en Tortuguitas. 1000 metros de pasto. Con la plata de la casa de mis viejes alcanza. Mi hermana Florencia y su marido me ayudan con arquitectura, inmobiliaria, arreglos, reserva. Tengo miedo de haberme olvidado de algo y que no sea verdad que voy a mudarme en febrero.
Todas mis energías puestas en creérmelo. Voy bien. Solamente por una belleza como esta podía dejar mi barrio y transplantar mi ecosistema. Tengo dos meses para moverme lento y cuidar las raíces para nuevos brotes.
Fotos tímidas por ahora. Ya lo gritaré a los cuatro vientos cuando sea mía.
