lunes, 22 de agosto de 2022

Los dos primeros clavitos del ecosistema recargado





 

Misterio amoroso escuchado a medias

 Ayer domingo Rafa estuvo hablando en dos momentos del día con una chica por el celu. Yo escuchaba palabras sueltas, mucha charla de Rafa, autodescribiéndose, mostrando su casa, y respuestas de una voz de mujer que no alcanzaba a comprender (yo, no ella). En un momento, yendo yo para el fondo, cazo claramente: "... que es una persona que no quiero mucho... Ah, ahí está...". Y me sonrió.

No dijo "mamá" y "madre". ¿Seré yo esa "persona"? Espero que sí.

Que los perros estén en la calle

Parece ser mi único problema, o la única excusa que me invento para la incomodidad, para el miedo y la angustia. Todo lo demás está genial en esta casa nueva. Y hasta la calle es menos peligrosa que la anterior y los perros están contentos y cariñosos conmigo y Rafa, su dueño oficial, entiende mis pánicos de transplantada y me acepta que los llame y los entre a mi capricho. Pero sigo incómoda, sigo necesitando que les integrantes de este nuevo ecosistema se me peguen al culo para sostenerme. Las gatas lo hacen por la noche: Kiki y Tigrilla se aceptan mutuamente para dormir una en cada lado de mi cuerpa asustadita. 

lunes, 15 de agosto de 2022

Inés

 En terapia, mi psicóloga me decía que mis sentimientos de culpa, de no merecer lo que vivo y hago, se deben al convencimiento inconsciente de que estoy viva mientras otre ha muerto, mientras alguien no puede tener lo que yo tengo y parezco usurpar. Terapia mediante encontramos una interrupción de embarazo en mi madre antes de tenerme a mí. Fácil racionalizar y difícil encausar la tristeza (que dominarla nunca) hoy que se murió mi gatita La Inés. 

Me acuso del estrezaso que le hicimos pasar con la mudanza pero la opción de dejarla en la casa a la que ella eligió llegar tampoco me parecía linda. Te agradezco, Inés, el habernos acompañado hasta acá y haberlo intentado con nosstres este casi mes de locura. Me alegra mucho que hayas conocido esta casa y tenerte para siempre en este lugar que habitaremos de acá en más.

Rafa dijo "Ya se quería ir, má" y "Te queremos. Inés, eras mi preferida, te vamos a extrañar".






lunes, 8 de agosto de 2022

Rara, como perdida

 La casa me gusta, no extraño casi nada (solo a Lolita y su calor incomparable al de este aire acondicionado ruidoso o este tiro balanceado escolar), pero estoy como ansiosa, como descolgada, asustada, pendiente de que algo malo vaya a pasar porque me olvidé de algo. Vicios de la no costumbre del éxito. Ya pasará.

(Iba a decir que mis hijes son infumables, no me tienen paciencia, son unes ingrates y no vienen a sostenerme el culo, pero es mentira y si fuera verdad, les perdono)

Dígame propietaria

 Compré casa y me mudé