Del que vive conmigo y, parece, está redescubriendo a una madre querible luego de adolescencia tormentosa:
"Ma, vos con las plantas sos como un duende."
"Yo en un tiempo requería que encontraras el amor, pero bué, si vos estás bien así..."
"Te quiero, ma, pero me voy a comer a mi pieza. No me acordaba que hacías ese ruido para comer la sopa."
No hay comentarios:
Publicar un comentario